jueves, 2 de abril de 2015

TODO LISTO Y PREPARADO

YA ESTÁ TODO LISTO PARA LA SALIDA PROCESIONAL,PERO ANTES DE NADA SE CELEBRARA LA EUCARISTÍA DE LA CENA DEL SEÑOR A LAS 17:30 EN LA IGLESIA SE SANTO DOMINGO DE GUZMÁN.TRAS LA EUCARISTÍA,DARÁ LUGAR A LAS 19:15 LA SALIDA PROCESIONAL DE LOS PASOS DE LA HUMILDAD Y PACIENCIA,JUNTO CON LA COFRADÍA DE PENITENTES DE LA MISERICORDIA,EL PASO DE LA UNCIÓN Y MORTAJA (STMO CRISTO DE LA MISERICORDIA,NTRA SRA DEL MAYOR DOLOR,LOS SANTOS VARONES,SAN JUAN Y SANTA MARIA MAGDALENA.) ACOMPAÑADO POR SU COFRADÍA PENITENCIAL DE LA UNCIÓN Y MORTAJA DE CRISTO. Y POR ULTIMO LA VIRGEN DE LA SOLEDAD ACOMPAÑADA POR VENERABLE HERMANDAD DEL SANTÍSIMO ROSARIO, NUESTRA SEÑORA DE LA SOLEDAD Y SANTÍSIMO CRISTO RESUCITADO.EL VIERNES A LAS 16:00 SALDREMOS DE SANTO DOMINGO PARA LLEGAR A LA CATEDRAL Y QUE A LAS 17:00 EMPIECE LA PROCESIÓN MAGNA,Y POSTERIORMENTE A LAS 22:00 SERA LA PROCESIÓN DEL SILENCIO.DESDE AQUÍ TE DESEAMOS UNA BUENA SEMANA SANTA.
PARA VER FOTOS DAR A LEER MAS.












No hay comentarios:

Publicar un comentario

Los Santos Varones, José de Arimatea y Nicodemus, apenas muerto el Señor, se presentaron a Pilatos pidiéndole autorización para desclavar el Cuerpo Sacratísimo de Jesús y darle Sepultura. Son muy de admirar y de imitar estos dos Santos Varones en su desprecio del qué dirán y en su valentía para dar ante el mundo testimonio de su fe y de sus convicciones.
En aquella la hora de la Tinieblas, como había dicho Jesús; la hora del triunfo aparente de los malos y de la cobardía y acoquinamiento de todos los buenos. Los fariseos se creían triunfantes; los discípulos de Jesús, llenos de temor, andaban todos dispersos y escondidos. Dar, pues la cara por El, era sencillamente exponerse a todo.
Pero los Santos Varones la dan; y se presentan sin temos ante Pilatos; y desprecian a los fariseos y a las burlas; y se honran extraordinariamente dando una sepultura honrosísima en un sepulcro nuevo, labrado todo en la piedra, y con extraordinaria abundancia de perfumes para embalsamar el cadáver, cual si se trata de un Rey , al que acababa de ser ajusticiado en una cruz entre dos ladrones.
Cristo había triunfado muriendo, y por eso hasta su entierro y sepultura tenía que revestir formas de grandeza.
“Un varón de nombre José, hombre bueno y justo, originario de Arimatea, rogó a Pilatos, que le permitiese tomar el cuerpo de Jesús; y bajándole le envolvió en una sábana y le deposito en un monumento cavado en la roca” (Lucas 23, 50-52)